Otro día sin encontrar las buenas sensaciones.

Hoy me he despertado a las 4:30, pero la pereza me ha hecho permanecer en la cama hasta las 5:15, de forma auto-obligada me he levantado diciéndome que esta semana ya había cumplido el cupo de días perdidos, al ser tarde he optado por equipar la mochila, para rodar 9k y después tirar hacia el trabajo completando en torno a 11.

Tras cumplir con el ritual matutino, he bajado a la calle empezando sobre las 5:45,he decidido mantenerme entre 7 y 7.20, pero a pasar de ir más lento que el día anterior, me he encontrado igual de mal, a estos ritmos hace tan solo una semana iba bastante cómodo, pero bueno es lo que hay, espero que para Madrid esté un poco mejor, pero si no ando fino aunque sea a gatas yo acabo.

Bueno al final 11.36 km en 1 hora 18 minutos y unos cuantos segundos, a una media de 6m 53s por km, esta media ha sido maquillada por los dos últimos km que han sido cuesta abajo, la real ha estado en torno a 7-7.05.

En lo positivo las taloneras parecen haber sido una buena idea ya que hoy no he notado molestias, también he probado el cinturón de botellines, el cual me ha resultado muy cómodo, con la salvedad de que los cuatro botellines me han resultado poco refrigerio para mi pesado tractor.

Mañana toca largo de 18km, pero sinceramente rodaré lo que me pida el cuerpo, ya que no estoy para mucho trote. Bajaré la intensidad, haber si me marco un entrenamiento de los de antes, en los que disfrutaba como un enano. Y es que desde que he sacrificado mis principios para hacer un entrenamiento más exigente, con el objetivo de mejorar mis tiempos para entrar dentro del tiempo límite en la Media, he pasado de un momento de subidón al ver que rodaba mucho más rápido, un minuto de media por km, a un estado de decepción, al ver que mi cuerpo empieza a protestar, y ha no darme lo que le pido. Estoy pensando que tal vez con unos macarrones con chorizo y un buen litro de fanta, todo podría volver a la normalidad.

Bueno va siendo hora de despedirse, un saludo a todos.